La Comisión de Fiestas recupera esta tradición que dejó de
celebrarse hace más de 60 años.
Plantación de árboles en el Jardín de la Escuela de Soto. Foto: Vanesa Díaz. |
Después de más de 60 años los
vecinos de Soto de Sajambre han vuelto a disfrutar de la Fiesta del Árbol. Una
iniciativa que trata de concienciar sobre la protección de los árboles y que este sábado 19 de abril volvía al
pueblo con conferencias, plantaciones y música en directo, entre otras
propuestas. En origen, la celebración
llegó a la escuela joracaña en 1909 de mano de D. Leonardo Barriada.
La jornada arrancó con una
conferencia a cargo de dos miembros de Greenpeace que profundizaron en algunos
de los riesgos que sufren actualmente los montes en España. Ambos subrayaron
que uno de los principales problemas actualmente es una gestión del monte demasiado mercantilista.
Minutos después y en el Jardín de
la Escuela varios niños protagonizaban la tradicional plantación de un árbol,
en este caso un acebo y un madroño,
acompañados por representantes de la Asociación Félix de Martino,
organizadora de la actividad.
A lo largo de toda la jornada y
en los jardines de la escuela los vecinos y turistas disfrutaron de una feria
de alimentación y artesanía donde estuvieron, entre otros, Anhura Joyeros o Repostería Montesori.
Los niños también tuvieron su
hueco en una tarde repleta de propuestas. Los más pequeños fueron protagonistas
de los juegos preparados por voluntarios de la Asociación Recolectivo. Por su parte, la Fundación del Oso Pardo
explicó los principales trabajos de la entidad para la protección de la especie
en otra de las conferencias de la jornada.
Una de las actividades más
aplaudidas del día fue la actuación de
la banda de Gaitas “Picos de Europa D.O.P. Cabrales” en la iglesia de Soto.
Catorce músicos interpretaron canciones tradicionales asturianas, jotas,
muñeiras y hasta una habanera dedicada a los indianos de principios de siglo
durante algo más de una hora. El broche final tuvo lugar en la carpa donde el
Trío Bronce y la discoteca móvil amenizaron la noche en la carpa instalada en
el principio del pueblo.